A 89 años de la Gobernación de Eduardo Tibiletti

José Antonio Artusi
Arquitecto – Docente

Mañana se cumplirán 89 años de la asunción de Eduardo Tibiletti como gobernador de la provincia de Entre Ríos, el 1 de Julio de 1935, cargo que ejerció hasta idéntica fecha de 1939.

Eduardo Tibiletti nació en Concepción del Uruguay el 5 de octubre de 1871 y murió en Buenos Aires el 4 de enero de 1940. Cursó el bachillerato en el Colegio del Uruguay, institución de la que luego sería profesor y más tarde rector. Designado por el presidente Roque Sáenz Peña en 1911, ejerció esa responsabilidad hasta 1920.  Antes había obtenido el título de abogado en la Universidad de Buenos Aires. También ejerció la docencia en la Escuela Normal de Concepción del Uruguay y presidió la Asociación Educacionista La Fraternidad. En 1922 Tibiletti se radicó en la ciudad de Buenos Aires, donde entre otras actividades se dedicó al periodismo, desempeñándose en el diario “La Razón”, en el que habitualmente abordó cuestiones vinculadas con la educación.

Enrique Pereira (1) comienza así su reseña biográfica: “destacado docente, rector del Colegio Histórico, concejal de Concepción del Uruguay, convencional constituyente en 1932, era presidente de la Convención que lo eligió candidato a gobernador, como prenda de la flamante unidad partidaria”. En efecto, es necesario recordar que el radicalismo entrerriano logró en ese momento unificarse, finalizando un cisma entre antipersonalistas e yrigoyenistas que duró prácticamente una década, en la que ambos sectores constituyeron fuerzas políticas separadas, que competían con sus propios candidatos en las elecciones generales. Es así como la Convención provincial que se realizó el 21 de febrero de 1935 en el cine “Urquiza” de Paraná, que Tibilettí presidió y en la que resultó electo candidato, fue la primera con el radicalismo unido tras la división que había sufrido a mediados de la década del 20.

Escuelas, cooperativas y colonos

Tibiletti, antipersonalista, estuvo acompañado por el yrigoyenista Roberto Lanús, de La Paz, como candidato a vicegobernador. El sector antipersonalista había proclamado el 1 de diciembre de 1934 en Gualeguaychú su propia fórmula, integrada por Luis Jaureguiberry y Francisco Mihura, quienes renunciaron para facilitar la fusión del radicalismo. Por otro lado, un sector minoritario del yrigoyenismo no aceptó la unificación y presentó una fórmula propia, encabezada por Gregorio Morán, dirigente de sinuosa trayectoria.

En las elecciones del 17 de marzo de 1935, las primeras tras la reforma constitucional de 1933 que estableció la elección directa del gobernador, Tibiletti obtuvo el 50,78% de los sufragios, Juan Morrogh Bernard (Partido Demócrata Nacional) el 40,8%, Morán el 7,11% y Juan Nux (Partido Socialista) el 1,31%. El radicalismo se impuso en todos los departamentos menos en Gualeguaychú y Gualeguay.

Eduardo Tibiletti sucedió al gobernador Luis Lorenzo Etchevehere (1931 – 1935) y su gestión fue continuada a partir del 1º de Julio de 1939 por la de Enrique Fermín Mihura, quien a pocos días de finalizar su mandato fue desalojado del poder por el golpe militar del 4 de junio de 1943.

El gabinete del gobernador Tibiletti, conformado en ese momento por sólo dos ministerios, estuvo integrado por el uruguayense Luis María Rodríguez en la cartera de Hacienda y por Sebastián Mundani primero y José María Garayalde después en la de Gobierno.

Sobre la gestión de gobierno de Tibiletti Enrique Pereira sostiene que se caracterizó por “la preocupación por solucionar problemas financieros de la provincia, acosada de alguna manera por el gobierno nacional fraudulento. Fue también tema sustancial la educación, continuando una labor que arrancaba desde 1914. El gobierno del doctor Tibiletti estimuló claramente el cooperativismo y la colonización”. El autor mencionado considera que “el gobernador no era un militante político en la acepción común del término, sino una respetada figura partidaria, a la que se apeló para sellar la unidad”, pero a la vez enfatiza que “se reveló como un gobernante de singular capacidad y perspicacia, que debió sortear situaciones de muy difícil solución”; y señala que “al finalizar su mandato el Dr. Tibiletti bajó al llano en medio del sincero respeto de todos sus comprovincianos”.

De refugio de matreros a vergel

Beatriz Bosch (2) analiza en particular la política agraria de Tibiletti: “la campaña comienza a despoblarse por la alternancia del distinto rinde de las cosechas. Los peones emigran a las provincias de Santa Fe y Buenos Aires. Más cuando antiguos moradores la abandonan, grupos de judíos víctimas de las persecuciones del nazismo alemán encuentran amparo y garantías en nuestra provincia”. La historiadora entrerriana recuerda “la plaga de la langosta, contra la que se lucha intensamente en 1935 y 1936. El desmonte avanza en las colonias oficiales entonces fundadas en Yeruá y en el distrito Potreros del departamento Uruguay. Algodón, papa y mandioca se siembra en el terreno libre. Se estimula la granja, instalándose un frigorífico regional para sus productos en Villa San José (Colón) en 1938”. Esta autora destaca que un “fomento especial alcanza a la zona del Delta. El refugio de matreros de antaño se transforma en un hermoso vergel. Alemanes, húngaros, holandeses, checoslovacos y suizos sanean los anegadizos y consolidan los bordes de las islas gracias a plantaciones de álamos, en tan gran número que singularizan ahora al paisaje”.

Manuel Macchi y Alberto Masramón (3) brindan un enfoque similar al de los autores citados: “aunque sin la hechura política de sus antecesores, el Dr. Tibiletti tuvo otras dignísimas aptitudes que sirven para el arte de gobernar como fueron las que había desplegado en el periodismo y en la docencia… De su gestión es digno de recordar la acción desplegada en favor de la colonización y de la educación popular, así como el dictado de la ley 3201 sobre fomento de la zona del Delta, con lo que se mostró una exacta visión sobre la importancia y el futuro de esa rica zona entrerriana”.

(*) Arquitecto Especialista en Planificación Urbano Territorial, integra la Cátedra de Planificación Urbanística de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UCU.