Hay veintisiete precandidaturas presidenciales. Sí, en serio: veintisiete. ¿Me vas a decir que ninguna te gusta? Daaaaale. Si son veintisiete. ¡Alguna te tiene que gustar!
Por ISAÍAS GOTTLIEB (Especial para EL MIÉRCOLES).
La vicepresidenta de la Argentina, que puso al Presidente en funciones (¿en funciones?) y a su superministro Massa, le hace creer a sus seguidores que no tiene nada que ver con las políticas que llevan adelante sus designados.
Cosas que pasan en la Argentina. Vaya uno a saber cómo Massa le hará creer a sus votantes que hará algo distinto a lo que hace Massa ahora, que ya tiene (casi) la suma del poder.
Por otro lado, la principal candidata opositora al peronismo es una histórica militante del peronismo. Sí. La candidata Patricia Bullrich fue una activa integrante de la JUP, cercana a Montoneros por aquellos años. (Ups. Parecido a la Presidenta, uy, perdón, la Vice).
En cambio, el principal candidato que el peronismo presenta “para que no vuelva la derecha” es de derecha: el superministro Massa, cuyo origen partidario fue en la Ucedé de Alvaro Alsogaray, además de sus archisabidas relaciones con la Embajada USA. Claro que en realidad Massa es un panqueque, una veleta, porque no hace mucho decía que con el kirchnerismo no iba “ni a la esquina”. Y no hay duda, es una veleta, sí, pero una veleta que siempre gira hacia la derecha
Y su único oponente interno, Juangra, el abogado piquetero progre, al que miran con simpatía los “progres” del kirchnerismo, es un incondicional seguidor del Papa, pero eso no les molesta a los “progres”, porque creen que el Papa es progre. Pero bueno, los progres se creen cualquier cosa ¿acaso no piensan desde hace años que Boudou, Anibal o Cristina son de izquierda?
Eso sí, las PASO están llenas de candidatos peronistas. Si no te gustan los candidatos peronistas del peronismo, afuera hay un montón más. Schiaretti, Moreno, Julio Bárbaro, Mempo Giardinelli, Jesús Escobar, Santiago Cúneo, un tal Ramiro Vasena… Hasta Biondini, el nazi, es también de origen peronista.
Y por si faltaba algo en la Galaxia Peronista, el otro candidato de Juntos por el Cambio también fue funcionario peronista. Larreta, funcionario de Menem. Es más, para quienes les gustan las casualidades, Massa y Larreta trabajaron juntos allá lejos y hace tiempo para un candidato peronista bien de derecha, bien menemista y bien neoliberal: Palito Ortega, qué felicidá, ja ja ja já.
Agreguemos que hay un candidato autodenominado “libertario” que quiere prohibir la libertad de protestar para proteger la libertad de las empresas de hacer lo que se les cante. Está en contra del Estado y quiere dinamitar el Banco Central. Ah, pero eso sí, quiere un Estado con una policía fuerte para meter presos a todos los que se opongan a su plan económico, que según él mismo, es como el de Menem y Cavallo. O sea, peronismo neoliberal. No, si al final, es como decía el General. Somos todos peronistas. Menos los troskos, los únicos en la lista que no salieron del peronismo.
A su vez Milei dice que está en contra de la “casta socialista”. Ah sí, porque para él los peronistas, todos (incluido Massa) y los de Cambiemos (incluido Larreta) son todos socialistas. Es más, hasta Espert es socialista para Milei. ¿Será por eso que el Partido Socialista (o lo que queda de él) va prendidito como furgón de cola de los liberales y conservadores de Juntos por el Cambio, y los pocos que quedan se pelean entre sí a ver quién consigue un lugarcito más arriba en las listas?
Pero eso sí, para Presidente, el Partido Socialista (o lo que queda de él) no apoya ninguna de las precandidaturas presidenciales de Juntos por el Cambio, y en cambio, apoyan a otro peronista, pero con un peronista que va por fuera del peronismo. Que no, no es Julio Bárbaro, sino Schiaretti.
Pero eso no es todo en la izquierda. El Partido Comunista (o lo que queda de él) está dentro de la alianza Unión por la Patria, que tiene un precandidato liberal y de derecha como Massa, y otro candidato papista como Grabois. Eso sí, los van a votar arropados con las banderas del Che.
Y finalmente está la izquierda trotskysta, que parece querer emular al peronismo: hay cuatro fórmulas presidenciales trotskystas (en serio, no es invento mío: las encabezan Gabriel Solano, Myriam Bregman, Marcelo Ramal y la entrerriana Manuela Castañeira) y dos de ellas compiten entre sí. Eso sí, todas las candidaturas trotskystas se presentan en nombre de la Unidad de la Izquierda y los Trabajadores.
Imposible aburrirse en la Argentina.
(Continuará, después de las PASO).
(elmiercolesdigital)